La Ley 34/2002 en pocas palabras
Imagina que tu web es una tienda física. La Ley 34/2002 sería como esa norma que dice que la puerta no puede tener escalones imposibles, la letra de los carteles debe leerse sin lupa y cualquier persona debe poder entrar y moverse libremente.
En el mundo digital, esta ley obliga a que todas las páginas web sean accesibles, es decir, que puedan ser usadas por cualquier persona, con o sin discapacidad.
Nada de botones diminutos, textos imposibles de leer o vídeos sin subtítulos.
Aunque la ley no detalla criterios técnicos, obliga a cumplir la normativa específica de accesibilidad vigente, como el Real Decreto 1112/2018 y la norma UNE-EN 301549, basadas en las WCAG 2.1 AA.
Contexto histórico: por qué nació la Ley 34/2002
La ley española de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico (LSSI-CE) se aprobó el 11 de julio de 2002, en un momento clave: el auge de internet y del comercio electrónico en España.
Su objetivo inicial era regular las transacciones online, proteger a los consumidores y garantizar un entorno digital seguro y accesible.
En sus primeros años, la accesibilidad digital no estaba tan desarrollada como hoy, pero la ley ya sentó las bases para que cualquier ciudadano pudiera beneficiarse de los servicios online.
Con el tiempo, la normativa se ha adaptado para alinearse con los estándares europeos y leyes más específicas, como el Real Decreto 1112/2018 y la Ley Europea de Accesibilidad.
¿A quién obliga la Ley 34/2002?
La LSSI-CE se aplica a:
- Administraciones públicas y sus organismos dependientes.
- Empresas que gestionan servicios públicos o reciben financiación pública.
- Empresas privadas de ciertos sectores (ecommerce, banca, transporte, telecomunicaciones…) cuando así lo exija su normativa sectorial o la Ley Europea de Accesibilidad.
💡 Excepción: Las micropymes (menos de 10 empleados y facturación anual inferior a 2 millones €) están exentas de algunas obligaciones, pero cumplirlas mejora la usabilidad y la imagen de marca.
Lo que debes cumplir según la Ley 34/2002
- Textos alternativos en imágenes.
- Subtítulos y transcripciones en contenidos audiovisuales.
- Contraste de color adecuado.
- Navegación con teclado y sin bloqueos.
- Compatibilidad con lectores de pantalla.
- Estructura clara de encabezados y formularios accesibles.
Ejemplos reales de buenas prácticas en accesibilidad web
- Govern Andorra: el Gobierno ha implementado la accesibilidad digital tanto en su web y Andorra Turisme que incluyen la navegación de Acctua. Este facilita la navegación a personas con diferentes grados y tipos de diversidad funcional, incluyendo discapacidades sensoriales, motrices o parálisis cerebral.
- Correos: ofrece un portal optimizado para lectores de pantalla y un sistema de navegación clara que reduce las barreras de uso para personas mayores.
Estos casos demuestran que la accesibilidad no es un añadido opcional, sino parte de la estrategia digital de empresas líderes e instituciones públicas.
Consecuencias de no cumplir
El incumplimiento puede generar multas de 601 € a 30.000 € en casos leves y hasta 600.000 € en casos muy graves.
Ejemplos:
- Una aerolínea española fue multada con 90.000 € por problemas de contraste y ausencia de textos alternativos (Fuente: Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030).
- Caso hipotético para pymes: Una tienda online sin navegación por teclado y sin descripciones en imágenes podría recibir una sanción de 3.000 €.
Y más allá de la multa, el impacto en la reputación y la pérdida de clientes puede ser mucho más costoso.
Impacto positivo de cumplir con la Ley 34/2002
Más allá de evitar sanciones, una web accesible:
- Amplía tu mercado: según la OMS, más del 15% de la población mundial vive con algún tipo de discapacidad, lo que supone millones de clientes potenciales en España.
- Mejora el posicionamiento SEO: Google valora la accesibilidad y premia las webs optimizadas con mejor visibilidad en buscadores.
- Aumenta las conversiones: una navegación clara y sin barreras reduce el abandono y facilita la compra o el contacto.
- Refuerza la reputación corporativa: demuestra compromiso con la inclusión y la responsabilidad social.
Cómo puede ayudarte Accesit Inclusivo
En Accesit Inclusivo, con nuestra herramienta Acctua, ayudamos a que cualquier web cumpla con la Ley 34/2002 y el resto de la normativa de accesibilidad.
Detectamos y corregimos automáticamente muchas de las barreras más comunes, mejorando la experiencia de todos tus usuarios y reduciendo el riesgo de sanciones.
Porque la accesibilidad no es solo una obligación legal: es una oportunidad para ampliar tu mercado y reforzar tu marca.